Gran conmoción está generando el caso de la agresión de una familia contra un vendedor de frutas en el municipio de Tehuacán, Puebla, misma que terminó en molestia social y un intento de linchamiento, así como el incendio de la vivienda de los presuntos agresores.
Debido a que no es la primera ocasión que algo así ocurre, te contamos cinco veces en que, con diversos métodos, los ciudadanos buscaron hacer justicia por mano propia... aunque no todo haya sido tan legal.
EL MÁS RECIENTE: EL VENDEDOR DE FRUTA
Como te contábamos, el caso del joven de Tehuacán desató mucha molestia, pues el joven fue golpeado entre tres personas, sólo por vender fruta en la vía pública.
Sus agresores acusaron que el joven les ‘estorbaba’ en el frente de su local.
La molestia ciudadana sin duda se encendió, pero lo peor llegó cuando los vecinos de la zona sugirieron al joven atacado denunciar y las autoridades sólo emitieron una orden de restricción contra los agresores, sin que hubiera un castigo.
Entonces los ciudadanos acordaron darle ‘su merecido’ a los atacantes y, alrededor de la una de la mañana de este jueves un grupo de comerciantes, moto repartidores y vecinos de la zona se dieron cita en las afueras de la casa de los agresores ubicada en la colonia Niños Héroes, para prenderle fuego a la vivienda y un vehículo, a fin de que salieran de la misma, pues buscaban lincharlos.
Al final, no hubo linchamiento, pero si un intento de.
EL CASO DE DOÑA CARLOTA
En abril pasado, Carlota ‘N’, una mujer de 74 años, protagonizó un ataque armado en el municipio de Chalco, reavivando entre la sociedad la discusión sobre la violencia y la justicia en el Estado de México.
Armada y acompañada por dos de sus hijos, la mujer irrumpió en una vivienda de la Unidad Habitacional Ex Hacienda de Guadalupe con la intención de desalojar a quienes consideraba como invasores de su propiedad.
La disputa verbal terminó en tragedia: dos personas murieron y un menor de edad resultó herido.
Las víctimas, Justin ‘N’, de 19 años, y su padre, Esaú ‘N’, de 51, intentaron resguardarse, pero fueron alcanzados por las balas. Un adolescente de 14 años también recibió impactos mientras trataba de ayudar.
La Fiscalía mexiquense logró capturar a la mujer de la tercera edad, dos días después del incidente, el 2 de abril, en coordinación con policías estatales y municipales.
En redes sociales, el caso conmocionó a la sociedad debido al debate sobre las acciones que llevan acabo los ’okupas’ y ’paracaidistas‘, quienes invaden terrenos, propiedades, casas o accesorias que no están habitadas.
Actualmente la mujer se encuentra llevando su proceso por homicidio doloso en prisión.
LA CARNITA ASADA CONTRA MG
Este caso viral demostró una vez más por qué el mejor amigo de un mexicano es otro mexicano.
Resulta que en enero de este 2025, gran relevancia cobró en redes sociales el caso de una mujer de nombre Alejandra Ceccopieri, quien llevaba más de un año en un conflicto con la agencia automotriz MG, de Reynosa, Tamaulipas, luego de que le vendieron una camioneta que no funcionó.
Aunque por todos los medios Alejandra buscó que le resolvieran la situación, incluso mediante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), MG tuvo ojos y oídos cerrados a los reclamos.
Ante esta situación, a Alejandra no le quedó de otra de manifestarse, este fin de semana, a las afueras de la agencia automotriz MG.
Lo que Ceccopieri nunca imaginó es que cientos de personas se sumaron a su manifestación, motivados por las redes sociales y, muy al estilo único de los mexicanos llegaron hasta grupos de música norteña, mariachis, asociaciones de autos, motociclistas, pastelerías, automovilistas en caravanas y hasta personas que llevaron un asador y carne asada para pasar la noche.
Al final, no sólo se disfrutó la carnita asada, sino también los tamaulipecos lograron que MG diera soluciones rápidas a la usuaria afectada... ¿No que no se podía?
CAMILA: EL ASESINATO QUE ENARDECIÓ A TAXCO
El 28 de marzo de 2024, el feminicidio de Camila, una pequeña de ocho años de edad, presuntamente asesinada por sus vecinos, enardeció a toda la comunidad de Taxco, Guerrero
Camila desapareció el miércoles 27 de marzo de 2024, cuando fue a jugar a la casa de una vecina, ubicada prácticamente frente a su casa, en el barrio de La Florida.
Horas después, gracias a un video de una cámara de vigilancia se supo que el cuerpo de la menor había sido sacado en una bolsa negra por su vecina, identificada como Ana Rosa, la vecina a la que Camila había ido a ver antes de desaparecer.
A fin de que sus atacantes no huyera, el jueves 28, en plena Semana Santa, una multitud enardecida irrumpió en la casa de Ana Rosa, a quien lincharon junto a sus dos hijos, Juan Alfredo y Axel.
Ella murió y los dos hombres fueron detenidos, también fue detenido José Ricardo, el taxista que ayudó a la Ana Rosa a deshacerse del cuerpo.
EL CASO DE LORD NAZI RUSO
En mayo de 2017, un caso conmocionó las redes sociales, cuando Aleksei Makeev, un ciudadano ruso, con residencia en México, hizo enfadar a la comunidad donde vivía, pues lanzaba insultos a quienes encontrara a su paso y subía videos a sus redes sociales con discursos de odio contra de mujeres, niños, adultos mayores y personas con discapacidad.
Conocido en las redes sociales como #LordNaziRuso, el hombre llegó a México a trabajar, pero fue despedido el 13 de noviembre de 2015, por su comportamiento agresivo y expresiones de odio contra los mexicanos.
El 19 de mayo de 2017, todo cambió, pues molestos por sus maltratos, específicamente uno contra una mujer y un niño, sus vecinos comenzaron a aglomerarse a las afueras de su casa, para exigir respeto.
Varias personas lanzaron piedras y algunos entraron al inmueble con la finalidad de sacar a Aleksei. El primero en ingresar fue Carlos Eduardo, un joven de 20 años, a quien Makeev recibió en la puerta con un arma blanca.
El extranjero hirió en varias ocasiones al joven causandole la muerte. Ante esta situación, la molestia de los pobladores creció y el hombre fue golpeado, apedreado y casi linchado por la comunidad.
Al final, Makeev sobrevivió y fue condenado a 37 años y seis meses de prisión, así como al pago de una multa y a la entrega de 405 mil pesos por concepto de reparación de daño, al haber sido encontrado culpable del asesinato de Carlos Eduardo.