Con cuatro votos a favor y uno en contra, la primera sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SJCN), ordenó este miércoles 11 de junio la liberación inmediata de Juana Hilda González Lomelí, quien había sido sentenciada a 78 años de prisión por el secuestro de Hugo Alberto Wallace, hijo de la fallecida activista Isabel Miranda de Wallace.
La Corte ordenó que la González Lomelí salga de prisión de inmediato, luego de 19 años tras las rejas, luego de que se comprobó que fue víctima de tortura y violencia durante su detención.
El ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena propuso brindar protección a la mujer, que se espera que en las próximas horas abandone el Centro Federal de Readaptación Social número 16, ubicado en el estado de Morelos.
Por su parte, el Instituto Federal de la Defensoría Pública (IFDP), que representa a Juana Hilda y a otras personas vinculadas a este caso, destacó que la justicia debe llevarse a cabo teniendo en cuenta la prohibición total de la tortura y el principio de exclusión de pruebas ilícitas.
“El fallo pone de relieve algunas de las violaciones más persistentes del sistema penal tradicional—como la obtención de pruebas bajo tortura, las violaciones al derecho de defensa y el uso de estereotipos y prejuicios de género en la valoración judicial de la prueba— que aún mantienen a miles de personas sujetas a proceso penal en el ámbito federal”, acotó en un comunicado.
¿CÓMO FUE EL SECUESTRO DE HUGO ALBERTO?
Según Isabel Miranda, su hijo fue citado en un centro comercial por una mujer con la que había tenido una relación sentimental. Al llegar al lugar, fue interceptado por un grupo de personas que se lo llevaron.
Ante la inacción de las autoridades de la Ciudad de México, Isabel inició una intensa búsqueda por su cuenta, reuniendo información y siguiendo pistas que la llevaron a diferentes lugares de la Ciudad de México y otros estados. También llenó las calles de espectaculares con fotografías de su hijo.
Su investigación dio frutos, pues la llevó a la identificación de varias personas que habríanparticipado en el secuestro y homicidio de su hijo.
Según la versión de Isabel Miranda y las investigaciones de las autoridades, Hugo Alberto fue mantenido en cautiverio en una casa de seguridad, donde fue torturado y asesinado.
Al menos seis captores participaron e intentaron obtener dinero a cambio del joven, pero las negociaciones no prosperaron. De acuerdo con la versión oficial, exigieron un rescate de 950 mil dólares.
La captura de los sospechosos se dio entre 2006 y 2010. Lamentablemente, los restos de Hugo Alberto nunca fueron encontrados.
Al final, el caso estuvo lleno de acusaciones de irregularidades en la investigación.
