Una funcionaria del Gobierno de Guadalajara encendió las redes sociales tras confesar públicamente haber participado en el sacrificio de un perro como parte de un ritual religioso.
Naomi Sofía Figueroa Álvarez, colaboradora especializada 7C en la Dirección de Colmenas y Centros de Cuidado Comunitarios, realizó la confesión durante una transmisión en vivo en redes sociales, donde habló sobre la religión orisha y la santería, prácticas que incluyen sacrificios de animales en sus rituales.
“Yo por ejemplo tuve que hacer un sacrificio, wey, muy grande, muy cul..., porque le cortaron a un perro”, declaró en el video, mientras ilustraba con un gesto de corte en el cuello. La funcionaria agregó que este acto buscaba fines personales: “Era para que me quitaran a mis enemigos del camino, wey; así que todos caen, todos caen y todos van a caer para que le sigan jugando al ver...”.
La grabación, que fue difundida por el usuario No al Maltrato Animal en TikTok, ha generado indignación en redes sociales, donde múltiples usuarios han exigido que las autoridades estatales investiguen el caso y sancionen a Figueroa Álvarez conforme a la ley.
De acuerdo con el Código Penal para el Estado de Jalisco, el maltrato o crueldad animal que cause la muerte puede ser castigado con penas de tres a cinco años de prisión, además de una multa que va de 200 a mil Unidades de Medida y Actualización, es decir, entre 22 mil 628 y 113 mil 140 pesos. También se contempla la posibilidad de trabajo en libertad en beneficio de la comunidad.
Figueroa Álvarez forma parte de la nómina municipal desde el 18 de marzo de este año, con un salario bruto mensual de 18 mil 400 pesos, que incluye sueldo base, ayuda para despensa y transporte. Es hija de Susana Priscila Álvarez, exdirectora del Instituto Municipal de Atención a la Juventud en Guadalajara, quien anteriormente enfrentó señalamientos por presunto desfalco.
El caso ha encendido el debate sobre los límites de la libertad religiosa y la protección de los animales en Jalisco, mientras se espera una respuesta oficial por parte del Ayuntamiento tapatío.