Durante su visita a San Luis Potosí, la presidenta Claudia Sheinbaum protagonizó un momento inusual que se volvió viral.
Un niño se le acercó con una petición muy específica: que permitiera nuevamente la venta de comida chatarra en las escuelas. A cambio, el menor le ofreció un reconocimiento simbólico: sería “la mejor presidenta de México”.
El encuentro ocurrió la tarde del sábado 24 de mayo en el Aeropuerto Internacional Ponciano Arriaga, mientras Sheinbaum realizaba actividades del programa Salud Casa por Casa.
Desde su auto, la presidenta fue abordada por ciudadanos que le pedían autógrafos y le hacían preguntas, cuando la voz del menor se escuchó con claridad: “Claudia, danos la comida chatarra por favor... y serás la mejor presidenta de México”.
Entre risas, Sheinbaum respondió: “No, hace mucho daño a la salud, hace mucho daño el azúcar”. La mandataria tomó con humor la petición del niño, quien insistió en su demanda mientras otros observaban la escena.
No obstante, aprovechó la situación para subrayar los riesgos del consumo excesivo de azúcares y alimentos ultraprocesados, y recordó la importancia de fomentar hábitos saludables desde la infancia.
Sheinbaum comentó que no es la primera vez que menores le piden lo mismo, y que incluso algunos le prometen su voto cuando sean adultos si levanta la restricción.
Sin embargo, reiteró su compromiso con el bienestar infantil y mencionó el programa Vida Saludable, una estrategia federal que busca mejorar la alimentación en las escuelas y reducir los índices de sobrepeso y obesidad en el país.
Desde el pasado 29 de marzo, está vigente a nivel nacional la prohibición de vender comida chatarra en planteles de educación básica. De acuerdo con la Secretaría de Educación Pública (SEP), las nuevas reglas regulan la preparación, distribución y venta de alimentos y bebidas en las escuelas públicas, con el objetivo de que México deje de encabezar la lista mundial de obesidad infantil.
